Sal 80:19 Oh Jehovah Dios de los Ejércitos, ¡restáuranos! Haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos. Cuando hablamos de los Salmos, hablamos de canticos- u oraciones expresadas de lo más profundo del corazón del salmista. Estas canciones- oraciones tienen algo muy singular, y es la sinceridad de un corazón que necesita de Dios para ser restaurado y bendecido. Desde que regrese de vacaciones he estado hablando de un tema en específico y es la intimidad y le sed de Dios. Cada mensaje, cada predicación tiene que ver con el hecho que la iglesia debe de crear un sentido de intimidad, de comunicación, de buscar el rostro de Dios en oración, en adoración, mientras pueda ser hallado. Este Salmo presenta muchas enseñanzas para nosotros; entre ellas: 1) Tenemos necesidades como pueblo de Dios: 2) hemos de clamar a Dios juntos; 3) debemos reconocer nuestras fallas; y 4) debemos confiar en el Dios misericordioso. Tenemos necesidades como pueblo de Dios/Reconocer nuestras fallas: La sinceridad del salmista es muy notable en este salmo, o suplica. La historia relata que este salmo es un canto de petición nacional al Señor para una restauración política y espiritual, después que el ejército invasor había arrasado el reino del norte. Cuando leo este Salmo, yo puedo ver además de la sinceridad del salmista, puedo notar que el salmista reconoce que el pueblo tiene un problema, tiene una necesidad. El salmista está reconociendo que el pueblo se había alejado de Dios por lo tanto Dios estaba indignado con ellos. Esto quiere decir, que un paso muy importante en la vida del creyente cuando nos acercamos a Dios, es el reconocer que somos nosotros los que nos hemos alejado de Dios, y que necesitamos un proceso de restauración. Cuando leo este salmo y veo que en 3 ocasiones el salmista le pide a Dios que restaure al pueblo, se convierte en un estribillo de una canción, donde se reconoce un problema, pero se reconoce la solución que es que Dios restaure al pueblo. La pregunta que nos tenemos que hace ¿Cuál era la necesidad del pueblo que este caso Asaf escribe? . Asaf si usted lee el antiguo testamento era parte del ministerio musical de David donde el mismo participaba de cánticos y del liderato. Este salmo, tiene sentido cuando entendemos que el contexto que se está viviendo es uno de soledad, uno de tristeza por la sequía espiritual, donde el pueblo experimenta un silencio de Dios. Por lo tanto esta sequía, hace pensar que Dios está indignado con su pueblo, y surge este cántico o esta oración donde el mismo Asaf entiende que Dios no les escucha. Sal 80:4 Jehovah Dios de los Ejércitos, ¿hasta cuándo has de mostrar tu indignación contra la oración de tu pueblo? Cuando leemos este salmo se puede notar claramente la desesperación de un pueblo por sentir la mano de Dios. Por lo tanto las lágrimas, la angustia que causa el separarse de Dios por sus acciones están muy marcado en el texto. La necesidad del pueblo se basa en su vergüenza. Ellos mismo se apartan de Dios, pero ahora reconocen que tienen un problema. Cuantas personas llegan a las iglesias con ese mismo sentimiento. Sentimiento de angustia, sentimiento de ansiedad, de lágrimas, de tristeza. Y esta oración hasta se parece a la que hacemos por las noches, ¿hasta cuándo voy a sentirme solo, sola? ¿Hasta cuando voy a vivir de esta manera, hasta cuando Señor que no veo ni siento tu presencia? Lo primero que el creyente debe de hacer es reconocer que tenemos una necesidad. Esta necesidad no es cualquier necesidad, es la necesidad de Dios es nuestro pueblo, necesidad de Dios en nuestras familias, necesidad de Dios en nuestra iglesia. Ese era el clamor del salmista. Hemos de clamar a Dios juntos. Esta oración hay que definir la bien. Porque esta oración no está hecha individual, esta oración está hecha a nombre de un pueblo que se une para reconocer que están lejos de Dios. Por lo tanto, es muy importante que usted y yo entendamos, que la bendición que se derrama de parte de Dios es para un pueblo que clama, para un pueblo que reconoce que Dios es su salvador, que entiende que sin Dios nada pueden hacer y no para un individuo solamente. Las bendiciones de Dios en las iglesias son para el pleno, digo, el que está en sintonía la disfruta, porque el que vive en queja eso es lo que recibe, queja. Algo que no podemos de perder en las iglesias en el fervor de orar, de clamar a Dios. Y usted me dirá y dale otra vez el pastor que hay que orar. Es que la oración es la clave para tener una comunicación con Dios. Y este clamor tiene que hacer el pueblo en su totalidad. La voz que se levanta buscando restauración es un pueblo en conjunto. Unidos en un solo clamor, "Restáuranos y seremos salvos". Muchas veces escuchamos que la salvación es individual, y para mí es un decir que la iglesia ha creado para justificar sus acciones de dividir, de aislarse y de no viviré en comunidad. Este pueblo, ante la incertidumbre de la soledad y de la sequía espiritual, clamó a Dios, pero lo hicieron en comunidad, lo hicieron en familia. Cuando usted pertenece a una iglesia, usted pertenece a una congregación, y uno llora con los que lloran y ríe con los que ríen. El propósito de Dios de crear un templo es crear sentido de unidad, de adoración en comunidad donde todos puedan acercarse a Dios como un solo pueblo. Debemos confiar en el Dios misericordioso. El salmista usa una frase 3 veces a lo largo de este salmo. “Oh Jehovah Dios de los Ejércitos, ¡restáuranos! Haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos” versículo 3, 7 y 19. La restauración de un pueblo se da cuando tú miras en perspectiva las características de este salmo que las he mencionado en esta mañana. Tenemos que reconocer cual es nuestra falla que no somos perfectos y que hemos cometido algún error. Por lo tanto el salmista da síntomas de ARREPENTIEMITNO, reconociendo sus faltas, y sobre todo pidiendo una restauración divina para todo el pueblo. Arrepentimiento es significado de virar, implica cambios, cambiar de opinión, de decisión. En este caso el pueblo se había alejado, pero deciden cambiar su destino, por el destino de Dios. Cuando el ser humano reconoce su condición, tiene la humildad de reconocer su error, y pedirle al Señor que lo restaure. El arrepentimiento demanda que nos humillemos y volvamos a Dios para recibir su perdón. Cuando nos volvemos a Dios, nos ayuda a vernos a nosotros mismos, incluyendo nuestros pecados, con más claridad. Y cuando vemos nuestro pecado, el proceso de arrepentimiento debe repetirse una y otra vez. Solo así seremos restaurados a la comunión con Dios. El salmista utiliza la frase, haz resplandecer tu rostro… el significado de esto Resplandecer tu rostro: Equivale a la expresión moderna «sonreírse». Esta sonrisa es significado de su misericordia hacia su pueblo, de su amor hacia sus hijos. Lo interesante de esta declaración es que el salmista dice que si tu rostro resplandece o sea, que si tú sonríes con nosotros es que seremos salvos. Es muy importante, que para poder experimentar restauración, tiene que haber arrepentimiento del pueblo, no de un sector, de todo el pueblo. Yo quiero que entendamos, que los tiempos que vivimos son tiempos duros. Pero en los tiempos duros es cuando nuestro Dios se deja sentir y ocurren los grandes avivamientos. Yo estoy seguro que para esta iglesia viene un gran avivamiento, no me mal interprete, porque no estoy hablando de un avivamiento de emoción. Estoy hablando de un avivamiento de personas volviéndose a Dios. De gente con hambre y sed de Dios. De personas que dejan todo por seguir los pasos del maestro. Sabes que, yo creo que si queremos restauración, queremos ver transformación, te pido que leas este texto bíblico en voz alta que lo explica con mayor exactitud. 2Cr 7:14 si se humilla mi pueblo sobre el cual es invocado mi nombre, si oran y buscan mi rostro y se vuelven de sus malos caminos, entonces yo oiré desde los cielos, perdonaré sus pecados y sanaré su tierra. Asi sea
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Author:El Rvdo. Pastor Carlos Armando López Gerena tiene un BA en Trabajo Social y una Maestría en Divinidad del Seminario Evangélico de Puerto Rico. Archivos
Marzo 2024
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