El sera un buen pastor...?

He escuchado muchas veces mencionar a personas sobre Jóvenes, él será un buen pastor. Cuando escuchas su fundamento para su argumento de que será un buen pastor, es que a su edad de joven se desenvuelve como un buen predicador.


La realidad es que este pensamiento es un error y una falsa ilusión para nuestros jóvenes que aspiran a ser pastores. Me quiero explicar el porqué. He visto en mis años en el evangelio a buenos predicadores que han fracasado como pastores, y he visto he visto buenos pastores que no son tan buenos en la exposición de la palabra. El problema no es si deben ser buenos o malos predicadores para ser un buen pastor. La predicación es un complemento en el área del ministerio pastoral no es el todo.

Cuando hablamos del ministerio pastoral, hablo de muchas áreas. La visitación, el cuidado y acompañamiento, la educación cristiana, la evangelización, la presencia pastoral en la comunidad, pero más importante (para mí) la compasión y sentir la necesidad de las personas. Si un pastor no se conmueve por la necesidad de otros sería un grave problema para su ministerio.

El ministerio pastoral es uno muy complejo. Además el pastor debe de tener el temple, una buena salud emocional para poder llevar un buen ministerio. Digo esto porque el pastor que no tiene una buena salud emocional estará todo su ministerio luchando contra los hermanos de su congregación, tomando las cosas personal, atacando desde el púlpito a los que están en su contra, controlando las vidas de sus feligreses, dando mal testimonio, etc.

Cada vez que un pastor dice desde el altar: “El que se quiera ir de la iglesia las puertas están abiertas” el mismo está demostrando su incapacidad de poder llevar un ministerio tan honroso donde el trabajo principal es trabajar con todo tipo de personas.

Por eso no es solo ser un buen predicador, por eso no es ser un buen exponente de la palabra. El ministerio pastoral es un ministerio hermoso, donde vives para bendecir la vidas de los demás. Donde inspiras confianza, donde inspiras a otros a tener una mejor calidad de vida, donde empoderas a otros a tomar las mejores decisiones, donde invitas a otros a cuidarse, etc.

Por eso cuando escuches que tal persona será un buen pastor… haz las siguientes preguntas: ¿tendré la pasión para darme a los demás sin esperar nada a cambio, no me molestara que alguien opine distinto a mi, no me molestara que me evalúen, no me molestara trabajar con un grupo de personas con diversas personalidades, no me molestara que otro tenga una idea mejor que la mía?

Mi interés no es juzgar ni mucho menos determinar quien tiene y quien no tiene llamado. Eso lo determina Dios. Mi interés es reforzar el llamado que Dios puso en ti. El ministerio del Pastor es lo mejor que me ha pasado en mi vida. He pasado momento maravillosos, como he visto los peores pecados en mi vida. Me han celebrado como me han juzgado y señalado. He reído como he llorado. Ante todo he aprendido que la gloria es de Dios, que puedo aprender de los errores, que cada año en el ministerio es uno nuevo de nuevas experiencias y nuevos retos. Que tengo que servir al que me abraza como al que no me acepta y lo tengo que hacer con amor y con Gracia.

Si volviera a nacer, no me vería haciendo otra cosa que ser pastor. Es lo mejor que me ha pasado.


Te ama


Pastor Carlo Armando