Vivamos como a Él le agrada....

Cuando tomamos la decisión de seguir a Cristo, la debemos hacer de corazón y totalidad. Esto conlleva una responsabilidad, una entrega y sobre todo una pasión por simplemente hacer su voluntad. 

Hay que dejar que Dios quite nuestro orgullo que divide en las iglesias, para que el amor que une predomine. Esto solamente lo causa un encuentro con Cristo y el querer ser transformado.



Vivir  como a Dios le agrada es haciendo su voluntad en todos los aspectos de nuestras vidas. El asunto de hacer su voluntad es que muchas de las personas viven según su ego, su orgullo, sus problemas de personalidad en querer llamar la atención y esto afecta la imagen de lo que es ser un cristiano. 


Hoy día todo es normal y todo es parte de....   Si alguien murmura y crea divisiones decimos eso es normal en la iglesia. Si alguien es cogido en pecado decimos que es normal en la iglesia y puedo seguir mencionando comportamientos que están fuera de la realidad de aquel que ha tenido un encuentro con Cristo.  


Este año 2013, hice un compromiso con Dios, en no callarme la boca en denunciar las cosas que están mal. Decir las cosas como Jesús las diría con la indignación y el respeto que merece el ser llamados hijos de Dios. Si queremos que las cosas comiencen a ser transformadas, no podemos tolerar los comportamientos que atropellan el testimonio de la iglesia.  Hay que denunciar con entendimiento, no por emoción. 


Por último:  La iglesia no puede patrocinar el odio, la falta de respeto y sobre todo la injusticia hacia el ser humano. La iglesia protestante, en la historia a dejado saber que los pecados no tienen colores, ni tamaños, enmarcado en la escritura.  Cuando hablamos del homosexualismo, la iglesia lo etiqueta como pecado. El pecado de irse en contra de la escritura de la formación de Dios que creó al hombre y a la mujer.  Si la iglesia protestante entiende que no hay pecado grande ni pequeño, que no hay tal cosa como tu pecas más que otro, si el pecado es pecado, entonces porque permitimos que los que murmuran, que atacan a los pastores con odio, los que fornican, adulteran, roban, tengan posiciones en las iglesias y tratamos con odio, con desprecio, con maldad al homosexual? 

No patrocino la conducta, pero si patrocino el amor al ser humano, tal como los haría Jesús.
Yo prefiero amar, transformar, y si voy a denunciar,  lo haré con respeto, con vocación, pero sobre todo por amor a la obra de Dios. 


Recuerda las palabras de Pablo a los Corintios "De modo que si alguno esta en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aqui todas son hechas nuevas. 2 Corintios 5:17"




ESTAMOS LLAMADOS A TRANSFORMAR NUESTRO PUEBLO...

---